Más allá de la educación tradicional, es decir,
del simple hecho de impartir un conocimiento, la educación ambiental relaciona
al hombre con su ambiente, con su entorno y busca un cambio de actitud, una
toma de conciencia sobre la importancia de conservar para el futuro y para
mejorar nuestra calidad de vida. La adopción de una actitud consciente ante el
medio que nos rodea, y del cual formamos parte indisoluble, depende en gran
medida de la enseñanza y la educación de la niñez y la juventud. Por esta
razón, corresponde a la pedagogía y a la escuela desempeñar un papel
fundamental en este proceso.
En su definición sobre Educación Ambiental, las Naciones
Unidas nos indica que ésta tiene como objetivos la formación de los individuos
para conocer y reconocer las interacciones entre lo que hay de natural y de
social en su entorno y para actuar en ese entorno. Intentando no imprimir a sus
actividades orientaciones que pongan en grave deterioro el equilibrio que los
procesos naturales han desarrollado, haciendo posible la existencia de una
calidad ambiental idónea para el desarrollo de la vida humana.
Es necesario abordar la temática del cuidado del medio
ambiente con la seriedad necesaria para poder revertir los hábitos que causaron
daños, hasta la fecha, a nuestro planeta. Es necesario incorporar la idea que
con el correr del tiempo y manteniendo comportamientos perjudiciales hacia el
ambiente vamos perdiendo la oportunidad de tener una mejor calidad de vida,
vamos deteriorando nuestro planeta y a los seres que habitan en él.
Es evidente la necesidad de sensibilización desde cada uno
de nosotros, para repensar en qué valores y actitudes, se acoda el cambio
cultural que debemos asumir, con respecto a las problemáticas ambientales.
Más allá de la educación tradicional, es decir, del simple
hecho de impartir un conocimiento, la educación ambiental relaciona al hombre
con su ambiente, con su entorno y busca un cambio de actitud, una toma de
conciencia sobre la importancia de conservar para el futuro y para mejorar
nuestra calidad de vida.
La adopción de una actitud consciente ante el medio que nos
rodea, y del cual formamos parte indisoluble, depende en gran medida de la
enseñanza y la educación de la niñez y la juventud. Por esta razón, corresponde
a la pedagogía y a la escuela desempeñar un papel fundamental en este proceso.
La educación ambiental es un proceso educativo, integral e
interdisciplinario que considera al ambiente como un todo y que busca
involucrar a la población en general en la identificación y resolución de
problemas a través de la adquisición de conocimientos, valores, actitudes y
habilidades, la toma de decisiones y la participación activa y organizada.
El niño crece y se desarrolla bajo la influencia de un
complejo proceso docente-educativo, en el que la escuela cumple un encargo
social que tiene el objetivo de que el futuro ciudadano reciba enseñanza y
educación, y se integre a la sociedad en que vive de una manera armónica,
formado política e ideológicamente en correspondencia con los principios de
nuestra sociedad. En este sentido hay que educar al niño para que ocupe
plenamente el lugar que le corresponde en la naturaleza, como elemento
componente de ésta. Él debe comprender que es parte integrante del sistema
ecológico y que, como tal, tiene deberes que cumplir.
La formación y el desarrollo de hábitos correctos en los
estudiantes, en lo concerniente a la protección del medio ambiente en la
escuela y sus alrededores, contribuyen a vincular la teoría con la práctica y a
familiarizarlos con estas tareas y exigencias a escala local. Esto facilita que
comprendan la importancia de la protección del medio ambiente y sus distintos
factores, a nivel regional y nacional, y cómo una sociedad puede planificar y
controlar la influencia del medio ambiente en beneficio de la colectividad.
Aprovechar estos temas, que son contenidos de la enseñanza
escolar pero con un fin, que no sea solo el de la información, que se
transgreda ese límite. Que llegue hasta la formación de un ciudadano consciente
e involucrado en esta problemática.
La necesidad de abordar la problemática ambiental requiere
de una perspectiva que involucre la crítica de los distintos saberes y el
desarrollo del conocimiento humano para la creación de alternativas. De ahí
que, además de los obstáculos económicos y sociales dados por el estilo de
desarrollo para abordar la problemática ambiental, las posibilidades de
revertir los procesos de deterioro ambiental se ven también limitados por la
propia conformación del proceso educativo y de construcción del conocimiento.
Es necesario abordar el estudio de lo ambiental en lo
educativo desde una perspectiva sistémica. Debemos estar conscientes que la
conceptualización de educación ambiental abarca contenidos de varios campos:
conservación, equidad, contaminación, ambientes urbanos/rurales, derechos
humanos, ecología, ciencias ambientales, educación integral, población,
energía, pobreza, ética, desarrollo sustentable, sociedad, tecnología, calidad
de vida, entre otros. Además, que dichos campos se entrecruzan y se traslapan.
Debemos entonces concretar qué relaciones, interacciones, resultados o
consecuencias nos interesa descubrir y posteriormente comunicar.
Desde el Estado es necesaria la incorporación con carácter
obligatorio de la materia educación ambiental en favor de las generaciones
futuras y una adecuada calidad de vida.
La educación ambiental en la Argentina está poco más que en
pañales, pese a los esfuerzos y los planes oficiales que se están tratando de
implementar, tanto en el Ministerio de Educación de la Nación como en los
organismos equivalentes de las provincias, debido a: La falta de conexión entre
las medidas individuales que se implementan y la problemática social, el
carácter temporal de las acciones propuestas (no conducen a la formación de
hábitos), no se permite desarrollar la creatividad de los sujetos, ya que no
hay continuidad entre el contenido que se transmite y las concepciones y
representaciones de los sujetos y para finalizar, la falta de la información
sobre los problemas locales en conjunción con la problemática nacional. La
asistencia oficial es escasa o prácticamente nula. Esto se debe,
principalmente, a la precaria importancia que frecuentemente se da a la
educación, tanto desde el estado como otros sectores de la sociedad, se traduce
como una contracción del sistema educativo público, como efecto de un
presupuesto bajo y la ausencia de un debate acerca de la calidad y beneficios
de la educación impartida.
Esta educación trasciende el ámbito formal de la educación
tradicional, no circunscribiéndose únicamente a los centros educativos, sino
empleándose, también, en el ámbito laboral, en la empresa o el centro de
trabajo, siendo éste un excelente vehículo para comunicar valores a favor del
ambiente, relacionándolo con las características productivas. Por otra parte,
el desarrollo eficaz de la educación ambiental demanda el pleno aprovechamiento
de todos los medios públicos y privados de que la sociedad disponga, a través
de diferentes sistemas y subsistemas de aplicación, vinculándose con la
legislación, las políticas, los planes y programas de ejecución, las medidas y
mecanismos de control y a todas las decisiones que los gobiernos adopten
respecto al ambiente.
Se debe estimular la formación de sociedades socialmente
justas y ecológicamente equilibradas, que conserven entre sí una relación de
interdependencia y diversidad.
La educación ambiental, en el contexto del desarrollo
sostenible, debe generar con urgencia, cambios en la calidad de vida y mayor
conciencia en la conducta personal, así como armonía entre los seres humanos y
de éstos con otras formas de vida.
La aplicación de la educación ambiental no
consiste, entonces, en una mera aplicación de ajustes y complementos a los
programas tradicionales de la educación, se trata, más bien, de convocar a
nuevos enfoques, nuevos contenidos y nuevos métodos, haciendo más flexibles las
tradicionales estructuras de los sistemas educativos. Fuente: www.ecoportal.net
Por: Por Cristian Frers, Técnico Superior en Gestión Ambiental y Técnico Superior en
Comunicación Social – Argentina
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