2,5% de la población mundial la consume. Su
incidencia en la alteración de capacidades y los peligros en la seguridad vial.
La marihuana es la droga ilegal de mayor consumo en el
mundo, la Organización Mundial de la Salud estima que se drogan con Cannabis
147 millones de personas, lo que corresponde a 2.5% de la población mundial.
Está claro que al igual que el alcohol, es la “puerta de entrada” al consumo de
otras sustancias legales e ilegales como medicamentos, cocaína, anfetaminas, y
heroína, entre tantas otras.
El alcohol es la sustancia más consumida en el mundo, y
causa múltiples enfermedades como falla hepática, diferentes tipos de cáncer, y
a su vez, es un grave factor de riesgo responsable de miles de muertes en
accidentes automovilísticos en todo el mundo.
Está demostrado que el alcohol es el mayor responsable de
causar accidentes de tránsito. Pero, ¿sabías que la marihuana es la sustancia
que ocupa el segundo lugar como causa de accidentes de tránsito fatales?
Fumar marihuana causa enlentecimiento en las reacciones,
dificultad para concentrarse, y disminución de la coordinación, por lo que está
claro que afecta severamente el manejo. Estos efectos negativos ocurren con el
uso de Cannabis a corto plazo, y así como también a largo plazo. O sea, cuando
alguien se junta con amigos a fumar, y luego de una noche placentera vuelve a
su casa o se va a bailar manejando, ese trayecto es sumamente peligroso para
esa persona y para terceros.
La marihuana es la droga ilegal que más frecuentemente se ha
asociado con alteraciones en las capacidades de manejo, y accidentes,
incluyendo mortales.
Un estudio en Australia que analizó a 3398 conductores que
murieron en accidentes de tránsito demostró que cuando se identificó
tetrahidrocannabinol (THC), la sustancia activa presente en la marihuana, en la
sangre del conductor, esa persona tenía mayores probabilidades de ser culpable
en el accidente. A su vez, se demostró que a mayor nivel de THC en sangre (2-5
ng/ml o más), mayor probabilidad que el conductor haya sido culpable del
choque.
A las personas que se les analizó la concentración de THC en
sangre, y especialmente las que tenían altos niveles, fueron 3 a 7 veces más
probable que hayan sido culpables de un accidente de auto comparado con
personas que no se habían drogado ni habían tomado alcohol antes de manejar.
Tomar alcohol y además fumar un porro de marihuana es más riesgoso que el uso
individual de alguna de estas sustancias. Esta situación no es infrecuente. Ya,
que es muy probable que la persona que consume marihuana también tome algo de
alcohol. La combinación de ambas sustancias que tienen un efecto depresor en el
cerebro, aumenta aún más el riesgo de un choque automovilístico.
Estudios científicos han identificado que hasta el 12.2% de
los conductores que murieron en un accidente de tránsito tenían THC en la
sangre.
Otras sustancias que están implicadas en la causalidad de
estos siniestros en la vía pública son los medicamentos como los opioides
(morfina, heroína, codeína, oxicodona), benzodiacepinas (alprazolam,
clordiazepóxido, diazepam), y drogas ilegales como cocaína, y anfetaminas. Los
opioides que se utilizan para el tratamiento del dolor moderado a severo, y las
benzodiacepinas indicadas para tratar la ansiedad, los ataques de pánico, el
insomnio y otras enfermedades, incluyen en sus advertencias del prospecto que
no se puede conducir durante su uso. Si la persona toma alguno de estos
fármacos de acuerdo a una prescripción médica no habría un problema porque
recibe las precauciones por medio de ese profesional. El grave inconveniente
surge cuando su uso no es supervisado, y se usan o abusan estos fármacos sin
tener presente las graves consecuencias que pueden causar. El abuso y adicción
a medicamentos es un problema grave cada vez más frecuente.
Según la normativa vigente, está permitido conducir con un
nivel de 0,5 g/l de alcohol en sangre en vehículos particulares, 0 g/l para
conductores profesionales de transporte públicos y carga, y 0,2 g/l para el uso
de motocicletas. Cifras que comparten varios países del mundo. Las personas
cada vez son más conscientes que es muy peligroso tomar y manejar, y las
campañas masivas de comunicación son efectivas para reducir las muertes por
accidentes de tránsito.
Pero, todavía no hay campañas de concientización para que
las personas que manejan no fumen marihuana; es igualmente peligroso. Debería
empezar a comunicarse este tema de manera urgente a nivel municipal, provincial
y nacional. Además, sería necesario que en los controles vehiculares, además de
investigar la alcoholemia, incluyan la detección de las otras sustancias que
fueron comentadas, especialmente la marihuana.
Por este y otros tantos motivos que comenté en columnas
anteriores, la Argentina no está preparada para la legalización de esta droga.
El Cannabis es una sustancia que también mata. Si manejas
además de no tomar alcohol, te recomiendo que no fumes un porro, podes matar a
alguien. Fuente: Perfil.com
Referencias
1. Neurociencia del consumo y dependencia de sustancias
psicoactivas
2. Brady
JE, Li G. Trends in alcohol and other drugs detected in fatally injured drivers
in the United States, 1999-2010. Am J Epidemiol 2014;179:692-699.
3. Hartman
RL, Huestis MA. Cannabis effects on driving skills. Clin Chem 2013;59:478-492.
4.
Ramaekers JG, Berghaus G, van Laar M, Drummer OH. Dose related risk of motor
vehicle crashes after cannabis use. Drug Alcohol Depend 2004;73:109-119.