sábado, 27 de abril de 2024

El cambio climático está dejando a la minería entre la espada y la pared



La industria tendrá que electrificar sus operaciones tanto como sea posible, no solo mediante el uso de renovables

Para la mayoría de nosotros, cuando pensamos en la minería y el medioambiente, solemos centrarnos en la contaminación del agua y del aire, desastres como el fatal colapso de presas de relaves o las consecuencias de la minería del carbón en el calentamiento global.

Pero la extracción de metales como el cobre, el níquel y el cobalto será cada vez más importante a medida que busquemos urgentemente formas de reducir las emisiones de otros componentes básicos de la economía global, como el acero, el cemento y el aluminio.

Para 2050, el Banco Mundial pronostica que la demanda de metales y minerales utilizados para producir las tecnologías de energía limpia que serán necesarias para cumplir los objetivos del Acuerdo Climático de París aumentará en casi un 500%.

Las nuevas minas traerán mayores riesgos para la naturaleza y la biodiversidad. El grupo conservacionista Re:wild, por ejemplo, advirtió que más de un tercio de los grandes simios de África están en riesgo debido al aumento de la demanda de minerales que son vitales para las tecnologías verdes.

Al mismo tiempo, el propio sector se está volviendo más vulnerable a los impactos del cambio climático, incluido el aumento de inundaciones, olas de calor, sequías y una mayor competencia por el agua. Un estudio de McKinsey encontró que entre el 30% y el 50% de la producción de cobre, oro, mineral de hierro y zinc se produce en áreas de alto estrés hídrico, y se prevé que esas cifras aumenten.

“En Chile, el 80% de la producción de cobre ya se ubica en zonas áridas y con estrés hídrico extremadamente alto; en 2040 será del 100%”, afirma la consultora, y añade que el 40% de la producción rusa de mineral de hierro sufrirá estrés hídrico extremo en 2040.

Recientemente, minas desde Brasil hasta Alemania han tenido que cerrar temporalmente debido a la escasez de agua, lo que ha costado a sus operadores millones de dólares. Reducir la intensidad del uso del agua en las operaciones mineras será crucial para mejorar la resiliencia de los activos de producción. El calor extremo y el aumento del nivel del mar son otros impactos climáticos que el sector tendrá que abordar.

La industria también enfrenta presiones para reducir sus propias emisiones a medida que las empresas de todo el mundo analizan cada vez más el impacto del carbono en sus cadenas de suministro.

“Aunque todavía no se valora el precio de los metales en función de su huella de CO2, ese día podría llegar”, señala la consultora McKinsey.

El carbón, que actualmente representa aproximadamente la mitad del mercado minero mundial, puede estar volando alto en este momento, pero la demanda, no solo de la generación de energía sino también de las acerías y los productores de cemento, retrocederá a medida que aumente la presión para descarbonizar. Muchas empresas mineras se enfrentan a la necesidad de reequilibrar sus carteras para reemplazar los ingresos de la producción de carbón.

La Comisión Global de Inversores en Minería 2030 se lanzó en 2023 para abordar riesgos sistémicos clave que desafían la capacidad del sector minero para satisfacer las demandas de la transición hacia una economía baja en carbono. A medida que aumentan la producción de minerales de transición, “deben hacerlo de manera responsable y sin dañar a las comunidades y al medioambiente, o arriesgarse a conflictos y oposición de las comunidades anfitrionas que a su vez socavarán la transición climática global”, dice.

La comisión, respaldada por $us 13 billones en activos bajo gestión, está presidida por Adam Matthews, quien también es director de inversiones responsable de la Junta de Pensiones de la Iglesia de Inglaterra. Dice que las áreas de enfoque de la comisión incluyen la minería artesanal, el trabajo infantil, el impacto de la automatización y la futura fuerza laboral, los derechos de las comunidades indígenas y de las Primeras Naciones, los impactos sobre la biodiversidad, el cambio climático, las represas de relaves, la reconciliación de conflictos y la corrupción.

“Para cumplir nuestros objetivos climáticos, es necesario ampliar o desarrollar muchas minas desde cero en áreas con dinámicas muy complejas”, dice Matthews. “Necesitamos un enfoque global sobre lo que se necesita para la transición, y donde se ubican esos activos, las comunidades deben beneficiarse”.

Los analistas de energía Wood Mackenzie dicen que el cambio a cero emisiones netas “requerirá un replanteamiento total de cuál es el espacio de la minería y los metales, y dónde debe estar”.

La industria tendrá que electrificar sus operaciones tanto como sea posible, no solo mediante el uso de electricidad renovable sino también reemplazando camiones gigantes alimentados con diésel por alternativas alimentadas por baterías o pilas de combustible, o utilizando GNL, hidrógeno u otros. También habrá oportunidades para mejorar la eficiencia mediante el uso de flotas autónomas, mientras que la inteligencia artificial y el aprendizaje automático también deberían optimizar las operaciones e identificar oportunidades para reducir las emisiones.

Matthews, sin embargo, subraya que la minería funciona en un marco temporal de varias décadas que a menudo choca con horizontes de corto plazo para los inversores. “Muchas de estas cosas requieren una cantidad considerable de trabajo, un compromiso real con las comunidades y desafiar los modelos de negocio que se centran en plazos más cortos de los que la industria realmente trabaja”, afirma.

Si bien hay una serie de iniciativas para ayudar a los operadores a reducir sus impactos, éstas no siempre están bien desarrolladas ni se aplican universalmente. “Existe un panorama complejo de normas y necesitamos cierta consolidación”, señala Matthews. “Y en algunas áreas no existen normas. Por ejemplo, hasta hace poco no existía una norma para los relaves, pero ahora se está desarrollando una”.

La plataforma Materialise de Schneider Electric, que lanzó en abril con el grupo Global Mining Pautas y Glencore, es una iniciativa que tiene como objetivo unir a los grupos de minería y minerales para reducir las emisiones en la cadena de suministro global del sector.

“Hay una multitud de actores diferentes en minería, minerales y metales, de diferentes tamaños y con diferentes capacidades para poder descarbonizar”, dice Rob Moffitt, presidente de minería, minerales

y metales de Schneider Electric. “Materialise se formó para ayudar a esas empresas a crear una masa crítica en toda la cadena de valor”.

Un área en la que la plataforma podría tener un efecto significativo es en el aumento del uso de energía renovable. “Al combinar el poder adquisitivo de diferentes empresas, podemos acelerar el despliegue de energía limpia a través de PPA (acuerdos de compra de energía) a escala de servicios públicos”, afirma Moffitt.

La plataforma también se utilizará para involucrar a miles de proveedores, compartir mejores prácticas y permitir a las empresas realizar un seguimiento de las emisiones de los proveedores.

“En el futuro habrá mucha más presión sobre el suministro de minerales críticos», afirma. “Si vamos a descarbonizar, realmente necesitamos estas industrias. Pero necesitamos descubrir cómo producir estos minerales de una manera más sostenible”. Fuente: La Razon 

(*) Mike Scott es periodista independiente especializado en negocios y sostenibilidad


sábado, 13 de abril de 2024

Franco y el bromuro

El bromuro es una sal peligrosa, perjudicial para la salud, pues ataca la glándula tiroides y, por consiguiente, al sistema endocrino


Manuel Vázquez Montalbán inventó el “carvalhismo”, una variante del género negro que tiene en el detective Pepe Carvalho su referente.

En las novelas que protagoniza, el citado se rodea de un trío de personajes que le va a servir para completar sus pasos hasta el móvil del crimen y, con ello, a la captura del criminal. Dichos personajes son criaturas que viven entre los márgenes y la incertidumbre, antihéroes a los que Carvalho ha adoptado a lo largo y ancho de sus paseos por la Barcelona secreta; caminos que siempre se presentan con tropezones que no son más que harapos de banderas rotas.

El trío de personajes lo forman una mujer y dos hombres. La mujer es Charo, prostituta y amante ocasional del detective. Los hombres responden a los apelativos de Biscuter y Bromuro. Este último es un limpiabotas malhablado y que debe su sobrenombre a lo mucho que repite una leyenda urbana de los tiempos franquistas, la misma que hace referencia al uso del bromuro en el pan y en el agua “para que no empalmemos”. Según contaba el personaje creado por Vázquez Montalbán, el veneno químico era el responsable de nuestra apatía ante la dictadura y ante la continuidad de la misma, establecida una vez muerto el dictador.

Ficciones aparte, el bromuro es una sal peligrosa, perjudicial para la salud, pues ataca la glándula tiroides y, por consiguiente, al sistema endocrino. La citada sustancia se utiliza en repostería industrial como costumbre y la podemos encontrar en la inofensiva tostada del desayuno, o en forma de aceite vegetal bromado en la composición de algunas bebidas energéticas. En Inglaterra, el uso del bromuro en el pan lleva prohibido desde 1990. Años después, Canadá y Brasil siguieron su ejemplo.

Según contaba el personaje creado por Vázquez Montalbán, el veneno químico era el responsable de nuestra apatía ante la dictadura y ante la continuidad de la misma, establecida una vez muerto el dictador

La ingesta de bromuro va a dificultar la conversión de la hormona tiroidea T4 -o tiroxina- en T3 -o triyodotironina-. Para que todo el mundo lo entienda, el bromuro viene a impedir un proceso natural que convierte el cuadrado formado por cuatro átomos de yodo (T4) en el triángulo formado por tres átomos de yodo(T3). Por esta razón, el yodo es un elemento tan importante para la tiroides: va a permitir el metabolismo celular.

Para quien no lo sepa, la tiroides es la glándula que se encuentra un poco más abajo del cuello, sobre la clavícula, y que tiene forma de mariposa con las alas abiertas. Sin yodo, la citada glándula se agota por falta de oxígeno, lo que imposibilita la combustión celular. Por decirlo de una manera poética, el bromuro actúa agarrándose a las alas de la mariposa hasta dejarla sin oxígeno, asfixiándola. El bromuro atenaza a la tiroides hasta acabar con el yodo que la mantiene sana.

Bien mirado -o mal mirado- esto último lo podemos trasladar a la metáfora de lo que fue el franquismo para los españoles, identificando el término real, es decir, la dictadura, con el elemento que actúa como término imaginario en la figura literaria, el bromuro. De esta manera, podemos dar la razón al limpiabotas malhablado de las Ramblas cuando denunciaba que, con el bromuro, los españoles habíamos perdido el vigor para levantarnos. Porque la castración de nuestra conciencia crítica llegó tras la Guerra Civil con la dictadura y el siniestro esplendor del Valle de los Caídos, monumento fúnebre y polémico que siempre reaparece a lo lejos, rematado por una oscura cruz que parece sujetar el cielo.

El Valle de los Caídos fue construido como un monumento para clasificar al pueblo después de la contienda; una guerra civil donde los perdedores que la sobrevivieron levantaron la cruz, a trabajos forzados, mientras que los que corrieron peor suerte fueron enterrados bajo las cunetas del régimen. En estos días que el Valle de los Caídos vuelve a ser noticia, se echa de menos una pieza de Vázquez Montalbán dando su visión crítica ante el acontecimiento del traslado de los huesos de Franco.

También se echa de menos una nueva entrega de Pepe Carvalho, pero esta vez en Cuelgamuros, con la momia de Franco como tema, mientras el limpiabotas, desde las Ramblas, sigue con lo suyo; afirmando que nada ha cambiado, pues antes nos metían el bromuro en el agua y ahora pagamos por ello. En detalles así, reside la continuidad de los tiempos, diría Bromuro.

El hacha de piedra es una sección donde Montero Glez, con voluntad de prosa, ejerce su asedio particular a la realidad científica para manifestar que ciencia y arte son formas complementarias de conocimiento.

Fuente: El Pais

País o estado: ¿qué diferencia hay?

La soberanía es la clave para distinguir un estado independiente del que no lo es


En el referéndum del 1-O, los catalanes deberán decidir si quieren que Catalunya sea un estado independiente o no. Pero, ¿qué es un estado y qué lo caracteriza?

En esencia, el estado es una forma de organización humana. Es una estructura política a través de la cual las personas nos organizamos en sociedad y convivimos. Un estado está compuesto de los siguientes elementos: un territorio concreto, una población (el grupo de personas que vive en ese territorio) y una autoridad central.

Sin embargo, el concepto de estado es una creación humana y por tanto ha sufrido variaciones a lo largo de la historia.

¿Un estado es un país?

En absoluto. No debemos confundir los conceptos de país y estado, porque sirven para denominar realidades distintas.

Un país es un territorio geográfico concreto que comparte una cultura, una población, una serie de leyes y es políticamente independiente. Está limitado por las fronteras o bordes que comparte con otros países.




Los países tienen soberanía o poder soberano: eso significa que pueden decidir sobre cualquier aspecto político y legal dentro de su territorio.

Estados independientes y estados no independientes

En cambio, debemos distinguir entre dos formas de estados: los estados políticamente independientes (que son países) y los que no lo son.

Los estados no independientes no tienen soberanía absoluta sobre su territorio, ya que comparten ese poder con una entidad política mayor. Un ejemplo son los 50 estados que conforman los Estados Unidos de América.

Los estados norteamericanos tienen autoridad en algunos ámbitos dentro de su territorio, pero no son independientes porque que comparten una autoridad central mayor: el gobierno federal de los Estados Unidos, que tiene su sede en la Casa Blanca.



Estados Unidos es un estado federal, una forma de organización que está descentralizada. En este modelo de país, los territorios se reparten el poder, otorgando parte de las competencias a la autoridad central y otras a las territoriales. Los límites y el reparto de estos poderes y competencias se recogen en la constitución federal.

Otros ejemplos de países formados por estados son Brasil, compuesto de 26 estados no independientes, o México, con 31 estados. También Alemania se divide en 16 länder, el nombre de los estados confederados alemanes.

¿Qué implica tener soberanía?

La soberanía es la autoridad en la que reside el poder político supremo. Es decir, quien tiene el poder en la toma de decisiones.

Los estados que componen Brasil o Estados Unidos tienen ciertas autoridades pero no tienen la soberanía, la autoridad clave donde reside todo el poder y la capacidad de decisión.

Algo parecido ocurre con las 17 comunidades autónomas que hay en España. Aunque no son estados propiamente dichos, estas autonomías tienen unas competencias o poderes especiales para el autogobierno, al margen de los poderes que tenga el gobierno central en Madrid. Estas competencias o poderes autonómicos se recogen en el estatuto de autonomía de cada comunidad.


En España, cada gobierno autonómico tiene un nombre. Por ejemplo, en Catalunya y Valencia es la Generalitat, en Madrid se llama la Comunidad, en Navarra es la Diputación Foral, en Galicia es la Xunta y en Andalucía, la Junta.

Por su parte, el gobierno central es una autoridad que está por encima de los gobiernos autonómicos y toma decisiones que afectan a la población de todas las autonomías. En este caso, España es un país y un estado independiente que no está formado por otros estados.

Fuente: La Vanguardia


jueves, 21 de marzo de 2024

Cambio climatico y el avance del dengue

 


Un estudio de Fiocruz en colaboración con el Observatorio del Clima publicado en Nature/Scientific Reports vincula la deforestación, las ocupaciones irregulares, la falta de saneamiento, el cambio climático (eventos de calor extremo y tormentas con inundaciones) con la actual epidemia de dengue en el país. En los primeros tres meses del año, Brasil ya registró más casos de dengue que el año pasado, superando los 1,8 millones de personas infectadas.

Lo que llama la atención de los investigadores es la reciente expansión del área de transmisión del dengue hacia las regiones Sur y Centro-Oeste, con un cambio de patrón debido al aumento de la temperatura en estas regiones. “Esto desencadena el proceso de transmisión del dengue, tanto por el mosquito como por el movimiento de personas”, explica el investigador Christovam Barcellos, del Observatorio Clima y Salud, autor de la investigación. “En estas regiones que sufren altas temperaturas también hemos visto una deforestación muy acelerada. Y dentro del Cerrado brasileño hay ciudades que ya tienen islas de calor, áreas suburbanas o periferias con malas condiciones sanitarias, lo que dificulta el combate a los mosquitos”.

Debido al cambio climático, el estudio concluye que “las áreas de mayor altitud, antes consideradas un factor limitante en la transmisión del dengue, hoy representan una zona geográfica susceptible a la expansión del área de transmisión del dengue y otros arbovirus”.

Sepa mas:

Cambio climático, anomalías térmicas y la reciente progresión del dengue en Brasil - Nature/Scientif Reports: https://www.nature.com/articles/s41598-024-56044-y

arvoreagua

lunes, 11 de marzo de 2024

El Conicet superó a la NASA en el ranking de las mejores instituciones científicas del mundo


El organismo argentino se posicionó en el puesto 20 a nivel mundial y hace 15 años mantiene el primer lugar en América Latina.

El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) obtuvo el primer puesto de las instituciones públicas de América Latina según el ranking de investigación SCImago. Además, según esa misma medición, se ubicó en el puesto 20 a nivel mundial superando incluso a la agencia espacial estadounidense de la NASA en la lista.

El ranking que evalúa diversas variables para calificar la excelencia de todas las instituciones científicas públicas a nivel global, está en funcionamiento desde 2009 y se actualiza anualmente. Desde su primera edición, el Conicet mantiene el liderazgo en la región, según los criterios establecidos por SCImago. Esta evaluación es realizada por un grupo de investigación perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad de Granada, la Universidad de Extremadura, la Universidad Carlos III de Madrid y la Universidad de Alcalá de Henares.

A nivel global, este ranking es reconocido como un punto de referencia gracias a su empleo de 17 criterios que evalúan la influencia de la producción científica en diversas categorías de entidades. En el sector público, el Conicet se posicionó en el vigésimo lugar a nivel mundial entre 1870 organismos y obtuvo el primer puesto en América Latina. En contraste, la NASA se ubicó en el trigésimo lugar.

Además, cuatro centros afiliados al Conicet se destacaron entre los diez mejores en la categoría de innovación en América Latina. En el tercer lugar se ubicó el Instituto de Investigaciones en Ciencia y Tecnología de Materiales (Intema). En sexto lugar, el Instituto de Biología y Medicina Experimental (Ibyme). En octavo y noveno lugar respectivamente, se encontraron el Centro Científico Tecnológico Mar del Plata (Ifimar) y el Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas (Inifta). Desde el inicio de la actual administración gubernamental, se han reducido drásticamente los fondos operativos y las becas otorgadas por el Conicet, llegando a recortarse más de la mitad. Se ha informado que, al menos en algunos institutos de la provincia, los investigadores tienen que costear los suministros de limpieza de su propio bolsillo y utilizar su tiempo de trabajo para realizar estas tareas, ya que el personal encargado de ello ha sido despedido. Fte: La Gaceta

Bayer anuncia una alternativa al controvertido glifosato, aunque defiende su inocuidad


El grupo químico y farmacéutico alemán Bayer está desarrollando un producto que podría utilizarse como alternativa al controvertido herbicida glifosato, a pesar de que el consorcio sigue insistiendo en que es seguro.

"Ya estamos probando esta nueva sustancia en plantas reales", con el objetivo de sacar el nuevo producto al mercado en 2028, es decir, dentro de cuatro años, anunció el consejero delegado de la compañía, Bill Anderson, en declaraciones al dominical "Frankfurter Allgemeine Sonntagszeitung" (FAS).

Según Anderson, se trata de la primera innovación pionera en este campo desde hace treinta años.

El glifosato fue desarrollado originalmente por la empresa agroquímica estadounidense Monsanto, adquirida por Bayer en 2018 por más de 60.000 millones de dólares.

Desde entonces, el consorcio alemán se enfrenta a decenas de miles de demandas por daños y perjuicios debido a un posible efecto cancerígeno del glifosato.

Bayer siempre ha rechazado las acusaciones, y Anderson insistió en ello durante una rueda de prensa el pasado martes con motivo de la presentación de los resultados financieros de 2023, al asegurar que "el glifosato es seguro", según recoge la agencia Efe.

Aún así, la empresa anunció que quiere buscar "nuevos enfoques dentro y fuera de los tribunales". para reducir los riesgos legales y las incertidumbres asociadas.

Los inversores llevan tiempo criticando el hecho de que el consorcio aún no haya logrado poner punto final a la cuestión del glifosato.

A finales de enero había unos 54.000 casos abiertos, 2.000 más que en octubre.

Las provisiones acumuladas por este motivo ascendían a finales de 2023 a 6.300 millones de dólares (unos 5.700 millones de euros).

expansion.com

miércoles, 28 de febrero de 2024

Bart de Strooper, biólogo: “Si no conseguimos un tratamiento contra el alzhéimer, será un desastre mundial”

El investigador ha creado ratones con 100.000 neuronas humanas en el cerebro para acelerar la búsqueda de fármacos contra la demencia


El biólogo Bart De Strooper, uno de los mayores expertos mundiales en la demencia, hace un pronóstico sombrío. Si la humanidad no consigue pronto, muy pronto, un tratamiento eficaz contra el alzhéimer, el futuro será catastrófico. Un consorcio internacional ha calculado que el número de personas con demencia se triplicará en el próximo cuarto de siglo, superando los 150 millones. “¿Quién cuidará de ellas?”, se pregunta De Strooper, nacido en la localidad belga de Tielt hace 64 años.


El psiquiatra alemán Alois Alzheimer describió el primer caso de la enfermedad que lleva su nombre en 1906. Más de un siglo después, la comunidad científica sigue sin entender los mecanismos exactos de las demencias. Hace casi tres décadas, De Strooper descubrió una especie de tijeras moleculares que dan lugar al amiloide, la sustancia proteica que se acumula en el cerebro y ha sido históricamente acusada de provocar el alzhéimer. El científico belga, del Centro para la Investigación del Cerebro y sus Enfermedades de Lovaina, defiende que el amiloide es más bien un desencadenante, que causa una reacción inflamatoria en las células cerebrales. Una vez iniciada, esa reacción es imparable, por eso los nuevos fármacos que eliminan el amiloide no consiguen impedir la demencia, según argumenta el biólogo.


El laboratorio de De Strooper acaba de crear ratones con 100.000 neuronas humanas incrustadas en su cerebro, con el fin de iluminar los enigmas de la enfermedad. A sus 64 años, el investigador se pega carreras de 15 kilómetros, pero recalca que el deporte no es milagroso: dos de cada tres casos de alzhéimer dependen de la lotería genética, explica durante una visita a Madrid para participar en una conferencia organizada por la Fundación Ramón Areces y la editorial Springer Nature.


Pregunta. Obviamente sus ratones con 100.000 neuronas humanas no tendrán mirada humana.


Respuesta. No, en absoluto. La gente fantasea, pero estos ratones, básicamente, parecen normales. Un cerebro humano tiene alrededor de 100.000 millones de neuronas, así que 100.000 células no forman nada que se acerque siquiera.


P. Pero un ratón solamente tiene 70 millones de neuronas en su cerebro. Ahí sí que 100.000 neuronas humanas ya son algo.


R. Sí, pero pensemos en un país de 70 millones de personas y una ciudad pequeña de 100.000 habitantes. No tiene un gran impacto. Algunas se integran en el cerebro, pero simplemente actúan como neuronas de ratón. Otras neuronas humanas forman una pequeña agrupación, un poco aislada del resto del cerebro. Es como si preparas una red de computadoras y todas son de Apple, pero añades otra de Hewlett Packard en medio. El resultado será el mismo, no es nada espectacular. Pero la ciencia que podemos hacer sí es espectacular, porque en esos ratones creamos placas de amiloide, como en el alzhéimer. Las neuronas de ratón no reaccionan mucho, pero las humanas desarrollan toda la patología del alzhéimer hasta que mueren. Es un modelo fantástico. El problema es que el cerebro de un ratón es así [hace el gesto de coger un guisante con dos dedos] y el de un humano es así [usa las dos manos para levantar un cerebro imaginario]. No es un modelo perfecto, por supuesto. El campo del cáncer va décadas por delante de nosotros, porque recibe mucha más financiación. Tienen fármacos específicos contra esta necroptosis [la muerte celular con inflamación] y los estamos probando en nuestros ratones.


P. ¿Funcionan?


R. Lo sabremos dentro de un año. Tenemos que esperar y luego abriremos su cerebro. Si funcionan, probablemente darán lugar a un tratamiento oral, una pastilla. Es importante que la gente se dé cuenta de la complejidad: tenemos fármacos para eliminar el amiloide y luego tenemos otro medicamento con el potencial de proteger las neuronas que están muriendo. La gran pregunta es: ¿Será suficiente? Tenemos un estudio preliminar que muestra un ligero efecto a la hora de mantener la memoria en estos ratones. No es espectacular, pero un ligero efecto es una buena noticia.


La regulación para experimentar con ratones es ridícula, deberíamos reflexionar

P. ¿Cree que habría que introducir neuronas humanas en monos?


R. Buena pregunta. Cuando hablamos de experimentación animal, parece que todos los animales fueran iguales y no nos importaran. Los ratones ya tienen una regulación estricta, que es ridícula si la pones en perspectiva. Si un restaurante tiene ratones en el sótano, los matan y a nadie le importa. En cambio, cuando hacemos un experimento con un ratón, minimizando el sufrimiento, tenemos que hacer un montón de papeleo. Deberíamos reflexionar sobre esta regulación. Los monos están más cerca de los humanos y creo que la legislación debería ser más rigurosa. Hoy en día creo que puedo resolver la mayoría de mis preguntas con este ratón humanizado, así que no voy a usar monos. Pero en otro tipo de experimentos necesitaremos usar monos. Si no es en Europa, tendrá que ser fuera de Europa.


P. ¿Qué tipo de experimentos?


R. Bueno, hemos desarrollado un oligonucleótido antisentido [una especie de tirita genética] para tratar una mutación específica del alzhéimer. Funciona en células de los pacientes en el laboratorio y tenemos indicios de que funciona en nuestro ratón. Pero no podemos inyectar estos oligonucleótidos en un ser humano sin una prueba intermedia en monos.


P. ¿Tendrán que hacerlo en China?


R. Todavía hay experimentos con monos en Europa, así que espero que podamos hacerlos aquí. Ese es el dilema. Si los haces en Europa, tú determinas las condiciones. Sin embargo, si los prohíbes aquí, se seguirán haciendo en China, Japón o Estados Unidos, y tú ya no tendrás voz al respecto. Y si encuentran un medicamento contra el alzhéimer en Estados Unidos o China, gracias a experimentos con animales que tú has prohibido, ¡qué hipocresía sería permitir que esos fármacos lleguen a Europa para tratar a nuestros pacientes con alzhéimer! El argumento de los animalistas es que ya no necesitamos experimentos con animales. No hay nada más lejos de la verdad. Un día hablé en la radio y recibí una oleada de odio en las redes sociales, me decían que era totalmente inmoral lo que hacía y que debería realizar los experimentos con mis hijos. Me pregunto qué hacen cuando el dueño de un restaurante mata un ratón. Eran ataques completamente fuera de lugar.


Puede llegar el día en que sea posible hacer trasplantes de neuronas en personas con demencia

P. Seguramente ya habrá científicos en China pensando en poner neuronas humanas en el cerebro de un mono.


R. Puede ser, pero no es tan fácil. Y además nosotros inyectamos neuronas humanas en ratones para acercarlos a los humanos. El cerebro de los monos ya es mucho más similar al humano, no veo razón para humanizarlo, teniendo en cuenta las dificultades. No creo que lo hagan. Nosotros hacemos estos experimentos para entender la enfermedad. Y ya han cambiado mi forma de pensar. Puede llegar el día en que sea posible hacer trasplantes de neuronas en personas con demencia. Una vez que tienes demencia, es demasiado tarde para curar tus neuronas, pero, si consigues reemplazar algunas de las que han desaparecido, quizá podrías restaurar tus capacidades cognitivas. Eso es lo que hemos visto en ratones.


P. ¿Un trasplante de neuronas de otra persona?


R. No, de ti mismo. Coges células de la piel o de la sangre, generas a partir de ellas células madre [capaces de convertirse en cualquier tipo de célula del cuerpo], las induces para que sean precursoras de las neuronas y las trasplantas al cerebro. Allí crecen, hacen conexiones y restauran los circuitos y el pensamiento. Esa es la teoría. En el párkinson ya hay experimentos clínicos en marcha: trasplantes de neuronas en la sustancia negra [una región del tallo cerebral implicada en el párkinson]. Nunca pensé que sería posible en el alzhéimer, porque es una enfermedad difusa, mientras que el párkinson tiene un objetivo muy específico para restaurar. Sin embargo, ahora se ha demostrado que estas neuronas pueden integrarse en el circuito cerebral, especialmente con los experimentos de mi colega Pierre Vanderhaeghen. Teóricamente es posible tratar a los pacientes con sus propias neuronas. Podrías trasplantar tus propias neuronas a tu cerebro.


P. El nombre técnico de sus animales es quimera de humano-ratón. Las quimeras eran monstruos de la mitología. ¿Qué le diría a la gente que cree que usted está creando monstruos?


R. Les pediría que observen lo que hacemos. Esto no es Frankenstein, simplemente estamos intentando entender la enfermedad, no crear cosas mejores o diferentes. Se trata de comprender cómo enferman las neuronas humanas y ver qué podemos hacer para prevenirlo. Si quieres decir que esto es un monstruo, es tu forma de pensar. Yo no te obligo a hacer los experimentos y tampoco te obligo a tomar cualquier medicamento que pueda surgir de esta investigación.


Esto no es ‘Frankenstein’, simplemente estamos intentando entender la enfermedad

P. Usted tiene 64 años. ¿Cree que vivirá para ver un tratamiento efectivo contra el alzhéimer?


R. Sin duda. Ya tenemos los primeros tratamientos efectivos autorizados en Estados Unidos, pero no sé si se aprobarán en Europa, porque son bastante caros y los resultados no son mágicos.


P. ¿Se refiere al lecanemab [un tratamiento de la farmacéutica japonesa Eisai y la estadounidense Biogen, que elimina el amiloide y retrasa un 27% el deterioro cognitivo]?


R. Sí, al lecanemab y al donanemab [otro tratamiento similar, de la farmacéutica estadounidense Lilly, que retrasa un 35% el deterioro cognitivo], que se autorizará pronto.


P. ¿Y qué piensa del aducanumab [el primer tratamiento contra el amiloide, de Biogen, aprobado con polémica en Estados Unidos en 2021]?


R. El aducanumab ahora se ha abandonado. El ensayo clínico se hizo muy mal, sus resultados no fueron convincentes y nunca se han librado de ese estigma. Utilizaron grupos de presión para conseguir la aprobación del tratamiento. También cometieron muchos otros errores. Creo que fueron muy arrogantes al pedir hasta 50.000 dólares por cada tratamiento. Los otros dos fármacos sí tienen un expediente impecable. Hay efectos secundarios, pero son riesgos conocidos. Los resultados tampoco son espectaculares, pero ¿qué quieres con el primer fármaco? Yo era médico en París cuando apareció el sida y nadie sabía qué hacer. Llegaron las primeras píldoras y había que tomárselas cuatro veces al día para ganar una semana de vida. Dos décadas después, el sida se ha curado, básicamente. Estos primeros medicamentos contra el alzhéimer son el comienzo de una nueva era. Y necesitamos más incentivos para encontrar fármacos más baratos que disminuyan el amiloide, aunque no veamos inmediatamente la ralentización de la demencia. Hay que darle una zanahoria a la industria, porque se necesita una inversión de miles de millones para obtener un medicamento así. Necesitamos que los gobiernos prometan que, si se consigue un fármaco así, lo aprobarán. Eso acelerará tremendamente la investigación.


P. ¿A usted le asusta la idea de sufrir alzhéimer?


R. Sí, me asusta. Mi madre murió por el alzhéimer.


Me asusta la idea de sufrir alzhéimer

P. ¿Y si en los próximos 30 años no descubrimos un tratamiento efectivo?


R. Será un desastre.


P. Se calcula que habrá 150 millones de personas viviendo con demencia en 2050, casi el triple que ahora.


R. Es un desastre a nivel mundial, pero fijémonos en nuestros países: España, Bélgica, Inglaterra, Francia. Tienen un sistema sanitario muy bueno y una población envejecida. ¿Quién va a cuidar a todas estas personas? Ya necesitamos llevarnos a las mejores enfermeras y cuidadores de los países pobres para que cuiden de nuestra población envejecida. Multiplica esto por tres. Solo puedo hablar en términos de desastre si no conseguimos algún tratamiento. Yo tengo 64 años y todavía corro 15 kilómetros. La prevención es muy importante para evitar la demencia en general, pero no tanto para el alzhéimer. Necesitaremos un tratamiento, algo que puedas tomar cuando tengas 60 años y elimine el amiloide, para posponer la enfermedad cinco o seis años, lo cual sería perfecto. De lo contrario, no veo cómo saldremos adelante como sociedad.


P. ¿La investigación del alzhéimer recibe poca financiación?


R. Recibe extremadamente poca financiación. En Europa es un desastre. Yo jamás diré que el cáncer debe recibir menos dinero, creo que obtiene lo que necesita. Lo que digo es que las demencias deberían recibir lo mismo.


P. ¿Cuál es la diferencia entre la financiación del alzhéimer y la del cáncer?


R. El cáncer recibe 15 veces más, en dinero y en todo. Hay unos 55 millones de personas con cáncer en el mundo. Y hay unos 58 millones con demencia. Es un problema de la misma magnitud, pero en las bases de datos hay cuatro millones y medio de estudios sobre el cáncer y apenas 350.000 sobre neurodegeneración. Unas 15 veces más.


La investigación del alzhéimer recibe extremadamente poca financiación, 15 veces menos que el cáncer

P. Un científico español, Pío del Río Hortega, descubrió en 1919 la microglía [células del sistema nervioso que lo defienden de agresiones].


R. Es nuestro Papa.


P. ¿Cuál es el papel de la microglía en el alzhéimer?


R. Es crucial. El amiloide es un desencadenante, pero luego está la reacción de la microglía y otros tipos de células. La microglía ve al amiloide como una especie de agente infeccioso y lucha contra él. Al hacerlo, hay inflamación, lo cual no es muy saludable para el cerebro. La microglía envía señales a otras células: “¡Vengan y ayúdenme!”. Así surge una reacción celular crónica que, en mi opinión, se inicia por la microglía. Es el actor principal. Una gran parte de mi investigación se centra ahora en la microglía. Creo que descubriremos fármacos capaces de atenuar esa inflamación.


P. Un científico español afirma que pensar que el amiloide es responsable del alzhéimer es como llegar a la escena de un crimen y creer que la sangre cometió el asesinato. ¿Qué opina?


R. Quizás era lógico hace 10 o 15 años. Entiendo por qué dice eso, pero no tiene en cuenta la genética. Hay pruebas absolutamente claras de que, si tienes un problema con el amiloide, puedes morir. Es como llegar a la escena del crimen, ver una pistola y llegar a la conclusión de que, probablemente, esa pistola sea la causa.


P. ¿El amiloide es la pistola?


R. El amiloide es la pistola, sí. Pero es más complejo que una pistola, porque con una pistola disparas y el paciente está muerto. En la vida real, el amiloide está ahí y luego hay una reacción, una inflamación. Necesitamos evitar los simplismos. Es una enfermedad crónica, como el cáncer. El cuerpo, en la juventud, es capaz de mantener el amiloide en niveles saludables. En la vejez, nuestra resistencia disminuye y esto se convierte en un problema. Es una enfermedad muy lenta. Un estudio de la Asociación de Alzhéimer de Estados Unidos mostró que, si logramos un fármaco capaz de retrasar el inicio de la demencia durante cinco años, el número de afectados permanecerá en las cifras actuales. Podríamos estabilizar el problema, lo cual sería fantástico. Yo soy optimista. Ese es nuestro primer objetivo: retrasar la enfermedad cinco años. Fuente: El Pais

EDP Business Summit 2024: La transición energética no puede esperar, pero... ¿es posible acelerarla?

La tercera edición del EDP Business Summit se celebrará el próximo 7 de marzo con un objetivo claro: estudiar cómo pueden contribuir las utilities, el resto de empresas y la sociedad en su conjunto a acelerar la transición energética. Todo ello con el fin de construir un futuro más limpio y sostenible para todos.


La transición energética se ha convertido en la gran revolución de nuestro tiempo, pero nos ha marcado un plazo límite. El impacto del cambio climático es cada vez más evidente y material, y no tenemos que alejarnos demasiado para comprobarlo. Hemos cerrado 2023 como el año más caluroso en la Tierra desde que empiezan los registros, con una alarmante temperatura media de 1,48 ºC por encima de los niveles de referencia preindustriales. Además, según datos de AEMET, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) y el Servicio de Cambio Climático de Copernicus, el pasado mes de enero fue el más cálido jamás registrado, tanto en España como en el resto del planeta.

Incendios, inundaciones, sequías, la subida del nivel mar y el aumento de la temperatura de sus aguas... no son pocas las muestras que el cambio climático va dejando a su paso. La Unión Europea, como líder mundial de la acción por el clima, se ha comprometido a alcanzar la neutralidad climática en 2050. Para lograr ese objetivo, es necesario mantener el rumbo marcado por su propia Ley del Clima y por el Acuerdo de París, con el fin de construir una economía sostenible y sólida ante los riesgos climáticos, libre de combustibles fósiles, con una industria tecnológica limpia y competitiva y, todo ello, a través de una transición que sea justa para todos y no deje a nadie atrás, asegurando un futuro más sano y seguro.

Así, la Comisión Europea recomienda que se fije un objetivo de reducción neta del 90% de las emisiones de gases de efecto invernadero para 2040, en comparación con los niveles de 1990. La energía desempeña un papel fundamental para conseguirlo, ya que es una de las principales fuentes de emisión de CO. Por ello, es necesario aumentar la penetración de las energías renovables en el sistema eléctrico, de tal forma que la eólica, la solar y la hidráulica sustituyan a los combustibles fósiles; e invertir en formas de almacenar la energía proporcionada por ellas para evitar que se desperdicie y poder utilizarla cuando sea necesario. La meta es conseguir que, en 2050, el 90% de la electricidad proceda de fuentes renovables y, al menos, la mitad del consumo energético proceda de la electricidad.

La COP28, celebrada a finales de 2023 en Dubái, logró un compromiso mundial histórico para abandonar los combustibles fósiles y apostar por las energías renovables. Más de 130 gobiernos nacionales acordaron trabajar juntos para triplicar la capacidad mundial instalada de energías renovables hasta alcanzar, al menos, los 11.000 gigavatios (GW) en 2030. Y es posible conseguirlo, ya que se calcula que las incorporaciones anuales mundiales de capacidad renovable aumentaron casi un 50% en 2023, fijando la tasa de crecimiento más rápida de las dos últimas décadas.

LOS GRANDES RETOS

Aunque pueden variar de un país a otro, es innegable que existen una serie de retos a los que los gobiernos deben enfrentarse para cambiar esta previsión y alcanzar estos 11.000 GW en 2030 y pueden resumirse, principalmente, en los siguientes: la falta de visibilidad sobre las políticas a largo plazo, la lentitud a la hora de desarrollar respuestas administrativas, así como una inversión insuficiente en infraestructuras de red, lo que impide que la energía limpia se inyecte más rápidamente. También los obstáculos administrativos, que hacen que el procedimiento de autorización sea engorroso, los problemas de aceptación social y la insuficiente financiación, tanto pública como privada, que reciben las economías emergentes y en desarrollo. Según datos de la Agencia Internacional de la Energía (IEA), afrontar estos retos podría suponer un aumento del 21% en el crecimiento de las energías renovables.

Si pensamos en España, también identificamos otros factores tales como la inflación o las tensiones geopolíticas, que condicionan el ritmo de esta implementación. A pesar de la gran riqueza de los recursos naturales de España, nuestro país no es el más rápido a la hora de desarrollar proyectos que contribuyan a alcanzar la transición energética. Por ejemplo, el proceso de conseguir autorizaciones y permisos para desarrollar nuevos proyectos en los tiempos que estos necesitan para ponerse en funcionamiento puede alargarse hasta más de cinco años. Todo ello puede perjudicar, también, la llegada de nuevas inversiones por la rentabilidad.

Ante esta situación y con el propósito de cumplir con los objetivos que plantea la transición energética es fundamental que exista un esfuerzo colaborativo. Esto implica combinar la inversión del sector privado con las políticas gubernamentales adecuadas y el compromiso de la sociedad. Y esto último es algo que afecta tanto a particulares como a las empresas, que deben participar activamente en la transición para que tenga éxito.

EL PAPEL DE EDP EN LA TRANSICIÓN ENERGÉTICA ESPAÑOLA

Una de las empresas que ha entendido perfectamente cuál es su papel en esta transición y que ya está trabajando para contribuir a cumplir sus objetivos es EDP, considerada la utility más sostenible del mundo según el Índice de Sostenibilidad de Bloomberg por 16º año consecutivo. Esta compañía energética global opera en toda la cadena de valor, desde la generación hasta la distribución y el suministro de electricidad; y aspira a que, en 2030, el 100% de su producción proceda de fuentes renovables, contando actualmente con el 87%.

En España, EDP cuenta ya con más de 5 GW de energía limpia instalada, de los cuales 2,2 GW corresponden a energía solar y eólica y 444 MW a energía hídrica. Debido a la cantidad y a la calidad de sus recursos naturales, nuestro país es uno de los mercados claves para su negocio, con lo que contribuye activamente a la aceleración de su descarbonización y a alcanzar los objetivos de la transición energética española. Pero... ¿cómo ayuda EDP a España a superar todos estos retos de los que hablábamos?

Para empezar, está contribuyendo a potenciar la colaboración público-privada. En EDP trabajan junto a las instituciones para acelerar los procesos de concesión de derechos, lo que se conoce en el sector como permitting; y, a la vez, para encontrar los mecanismos adecuados de remuneración de las inversiones. Al mismo tiempo, colaboran activamente con las comunidades locales en las que se desarrollan sus proyectos. Sin embargo, donde EDP ha demostrado su carácter innovador y pionero es en la incorporación de nuevas tecnologías sostenibles que aprovechan las infraestructuras ya existentes: la hibridación, la repotenciación o repowering y el sobreequipamiento.

EDP Renewables, filial 100% renovable de EDP, se ha posicionado como compañía pionera en hibridación, ya que ha sido la primera en conectar y producir con éxito energía limpia en el primer parque híbrido de España, algo que también ha logrado en Portugal y en Polonia. Un polo híbrido se crea al añadir dos o más fuentes renovables de electricidad en la misma subestación. En estos casos, se combinaron las energías eólica y solar. Así, por ejemplo, si una planta solar se construye en un parque eólico ya existente, se aprovechan sus infraestructuras y se maximiza la producción de energía limpia. También ocurre que, al no depender de nuevas licencias, las nuevas formas de producción de energía pueden introducirse más rápidamente en la red, dando solución a una de las mayores preocupaciones del sector. Además, que ambas tecnologías se localicen en un mismo punto mejora los costes de exportación y mantenimiento, de manera que la producción es más rentable. EDP ya ha puesto en funcionamiento dos centros híbridos en 2024 y prevé poner otros dos en nuestro país.

Pero su apuesta por la optimización de la tecnología no se detiene aquí. Hay que destacar que, a pesar de la corta edad de la flota de aerogeneradores de EDPR, la empresa está trabajando en varios proyectos piloto de repotenciación o, en el caso de que esto no sea posible, de reciclaje de palas eólicas. En España, por ejemplo, ha conseguido aumentar en un 75% la producción de energía en dos parques eólicos gracias a la repotenciación. Concretamente, en los parques eólicos de Zas y Corme, ambos ubicados en La Coruña. Por su parte, en cuanto al sobreequipamiento o tecnología que instala más aerogeneradores, se está ampliando la vida útil de un parque eólico, al tiempo que suministra más energía limpia a la red de forma más rápida, sin las complejidades asociadas al desarrollo de nuevos proyectos.

Además, con el fin de proporcionar mayor estabilidad a la red y combatir así la intermitencia de las fuentes renovables, no cesa en la búsqueda de oportunidades de almacenamiento, claves en el proceso de integración de las renovables porque consigue combatir el reto de la intermitencia de las fuentes de energía limpia. Actualmente, EDP está desarrollando un innovador proyecto en la provincia de Cuenca, donde un parque híbrido combinará energía eólica y solar y, además, contará con un sistema de almacenamiento para que la energía producida excedente se pueda reutilizar en el momento que sea necesaria. Todos estos factores demuestran la capacidad de EDP para adaptarse y entender cómo está cambiando el sector. Las renovables no son el futuro, ya son el presente y EDP está ya contribuyendo a hacer del mundo un lugar mejor para las generaciones venideras.

EDP BUSINESS SUMMIT 2024

Tras el éxito de la pasada edición de EDP Business Summit, donde se reunieron más de 1.000 participantes de más de 20 geografías, la cita vuelve este año con el objetivo de llevar la conversación un paso más allá, estudiando cómo pueden acelerar la transición energética tanto las utilities como el resto de las empresas, desde una perspectiva global. Se analizarán, además, las últimas tecnologías y los modelos empresariales que configuran el futuro energético. Y todo ello con el objetivo de reflexionar sobre los mayores retos y oportunidades a los que se enfrentan los líderes mundiales a la hora de planificar y ejecutar sus estrategias de descarbonización.

La COP28 logró un compromiso mundial histórico para abandonar los combustibles fósiles y apostar por las energías renovables y, a la vez, puso sobre la mesa una oportunidad única para abordar otras preocupaciones relacionadas con la seguridad energética, la rentabilidad, el crecimiento económico y la competitividad industrial, persiguiendo siempre el objetivo de garantizar un planeta en el que puedan vivir las generaciones futuras. Pero, ¿qué hace falta para lograr una transición energética que beneficie a todos? Desde EDP están convencidos de que se necesitan políticas públicas adecuadas, inversiones del sector privado, avances tecnológicos, soluciones consensuadas y, en definitiva, el compromiso de la sociedad.

De todo ello se hablará el próximo 7 de marzo en Lisboa, durante la tercera edición de este EDP Business Summit, una jornada única con ponentes de renombre internacional y conferencias que invitarán a la reflexión y al debate. La compañía está firmemente comprometida con seguir sensibilizando a la opinión pública sobre los beneficios que aportan las energías renovables y está convencida de que esta cita contribuirá a crear conciencia de la tan necesaria transición energética en España. Pero, sobre todo, espera que impulse la toma de decisiones colectivas, especialmente entre los responsables de ello y los líderes empresariales, en nombre de un futuro más limpio y sostenible para todos. Fuente: El Mundo

Realizado por UE Studio

Este texto ha sido desarrollado por UE Studio, firma creativa de branded content y marketing de contenidos de Unidad Editorial, para EDP.